venres, 30 de xuño de 2023
Luísa Villalta: Letras Galegas 2024
xoves, 29 de xuño de 2023
mércores, 28 de xuño de 2023
martes, 27 de xuño de 2023
luns, 26 de xuño de 2023
domingo, 25 de xuño de 2023
Paisaxe imaxinaria con edificios clásicos
Presenta grandes paralelismos coa serie "Genoa" de William Adams & Dond, de Stafforshire.
María Quiroga Figueroa: A louza de Sargadelos (Colección do Museo Provincial de Lugo), p.104
xoves, 22 de xuño de 2023
mércores, 21 de xuño de 2023
martes, 20 de xuño de 2023
luns, 19 de xuño de 2023
domingo, 18 de xuño de 2023
Mientras viva [Manuel Vicent habla de la muerte de su hijo]
Artigo completo en EP (18.06.2023), aquí
sábado, 17 de xuño de 2023
venres, 16 de xuño de 2023
xoves, 15 de xuño de 2023
In memoriam
Ya que hablamos de ganado recordemos el refrán: Unos llevan la fama y otros cardan la lana. Algo así sucede con los actores metidos en política. Esta semana murió Glenda Jackson, una mujer de talento descomunal que aún encontró ganas para ser diputada laborista durante años. Su generación fue pionera en sacudirse las servidumbres de la fama, casi siempre el silencio y la sumisión al dinero, para añadirle el condimento de la participación pública y un posicionamiento personal. Puede ser molesto, en ciertos momentos incluso obsceno o inadecuado, pero que la gente participe en los debates públicos es pura esencia democrática. Los actores, a partir de ese momento, salpimentaron como notas al pie las luchas ideológicas. De Jane Fonda a Vanessa Redgrave, el activismo los llamó. Susan Sarandon suma tantas detenciones como premios, gloria a ella. Sin embargo, los dos actores con más poder político en Estados Unidos han pertenecido a las filas conservadoras. Ronald Reagan llegó a presidente y Arnold Schwarzenegger aún aspira a repetir el salto desde gobernador de California a la Casa Blanca. En España los actores fueron voces destacadas durante la Transición. Un fuego que revivió durante la invasión de Irak, ese desastre geopolítico que, entre otras consecuencias gravísimas, produjo el descrédito de los países democráticos, la emigración forzosa de millones de personas y la inestabilidad mundial.
Esa chapuza empujó a Glenda Jackson, látigo anti-Thatcher, a oponerse con furia a su propio líder laborista, el inconsistente Tony Blair. Pese a llevar la razón histórica, en el caso español la participación de los actores en la trifulca política los convirtió en perdedores. Durante años, la maquinaria de extorsión se afinó para lograr callarles la boca. Al día de hoy, apenas nadie se atreve a opinar en público. Te cierran el negocio después de una cascada de amenazas, plantillazos y la fina literatura de los articulista ultratolerantes solo para las opiniones idénticas a la suya. Callar no fue una recomendación, sino un mandato. Aunque aquí ha sucedido como en Estados Unidos, que se daba por supuesta la filiación progresista de los cómicos, pero los únicos que ocupaban cargos eran las excepciones conservadoras. El mejor ejemplo fue aquella surreal Oficina del Español que pagaron los madrileños a Toni Cantó durante el tiempo que fue útil a la monserga. Dicen que ha llegado el tiempo de los toreros. Madrid fue pionera en darles cargo, aunque también con recorrido más oportunista que nutritivo. En Valencia ocupará la vicepresidencia del gobierno autónomo un antiguo matador. Al corto plazo, el mundo taurino sale ganando, pero quizá al largo sea un error identificar su arte, nunca defendido como se merece, con los postulados ultrareaccionarios. Pasa un poco como con los ecologistas que rocían con puré los cuadros de un museo, logran el descrédito de su causa, aunque solo sea por oposición al fanatismo.
Artigo completo de Fernando Trueba (EP. 2006.2023)
mércores, 14 de xuño de 2023
O Reino á volta de 1050
Olhem o ano 1050 e procurem diferenças quando o mapa é feito na Espanha ou fora dela. Alehop! Galiza desaparece dos mapas espanhóis. Mínimo: indiferença e desprezo pelo nosso país, mas podemos falar melhor de falsificaçom histórica por critérios políticos e centralismo.
luns, 12 de xuño de 2023
sábado, 10 de xuño de 2023
Caprichos anatómicos: el cremáster
Dioses, emperadores, científicos, actrices, escritores, jugadores de fútbol y artistas se mezclan de modo triunfal en acontecimientos históricos, descubrimientos y en la filosofía griega. Desfilan Tiziano y Cervantes por la imaginación del autor sin provocar nada parecido a un pesar elegiaco, o repugnancia, ni tan siquiera una parodia psicoanalítica, como correspondería a un argentino, y sí, muchas veces, una sonrisa. Así nos describe Maurette su visita al Museo Mütter de Filadelfia, acompañado de su esposa: “Frente a una vitrina que contiene un megacolon relleno de paja —estrella de la colección, junto a las fetas del cerebro de Einstein— apreciamos estupefactos la elasticidad del aparato digestivo de un hombre que murió a los 29 años a causa de la enfermedad de Hirschsprung, un mal congénito que impide que el intestino mueva los desechos hacia el recto. Su forma hace pensar en una lombriz prehistórica gigante o en un monstruo que llegó de una galaxia muy lejana. Se me ocurrió que los trillones de microorganismos que nos habitan no son los únicos extranjeros de nuestro cuerpo. Al verlos en vitrinas, flotando en recipientes de cloroformo, disecados, embalsamados (…) me resultaron enormemente extraños, y la idea de ser un revoltijo de todo eso me pareció de una abyección indecible. Miré a mi mujer, a quien veo todos los días desde hace 12 años, y no la reconocí”. [...]
La guinda de este particular tratado está en el capítulo más oscuro, dedicado al cremáster, órgano conocido por la anatomía moderna, que es el nombre que tiene el músculo del cordón espermático, gracias al cual los testículos cuelgan en el escroto. Para Maurette, es clave para “desvelar el misterio de la distinción entre los sexos”. Y aquí, señorías, el amor, el sexo-género y la política se han vuelto dolorosamente próximos.
Artigo completo de Ángela Molina (EP, 10.06.2023)
Salón en Candem
En Harmood Groove (Camden Town, Londres): casa con ‘pop art’ nas paredes, butaca azul, tapices centenarios e dúas lareiras victorianas
venres, 9 de xuño de 2023
xoves, 8 de xuño de 2023
Giorgione: A tempestade (ca. 1508)
mércores, 7 de xuño de 2023
Cirrios
Adoitan chegar a fins de abril ou primeiros de maio despois de teren viaxado entre once e vinte mil kilómetros. Invernan na África subsahariana, principalmente nos territorios de Malí, Níxer, o Congo, Zambia ou Angola. E aquí entre nós só permanecen uns tres meses, cen días.
martes, 6 de xuño de 2023
domingo, 4 de xuño de 2023
James Ivory, cineasta: “He vivido mi homosexualidad sin miedo y sin culpa”
La vida de Ivory puede leerse como una historia de falos. Por lo menos, así la narra el propio director en su autobiografía, en la que pasa revista a todos los miembros viriles con los que se ha topado. “Bueno, no fueron tantos. Solo dos o tres…”, sonríe. Sus páginas lo desmienten. Está el de su mejor amigo del colegio, que intentó introducirse en la boca sin rozar el interior de sus mejillas “para evitar los gérmenes”. Está “el prepucio rosado y colgante” de otro, observado furtivamente en el gimnasio, que le recordaba “a las antiguas estatuas de mármol” de los manuales de arte griego. Está “la polla de aspecto pesado” de Ted, otro colega, “de la variedad mangueras de jardín”. Y, por último, también “la verga rosada que conjuntaba con las mejillas” del escritor Bruce Chatwin, con quien tuvo una aventura.
Asombra que Ivory, maestro del cine de época más refinado, el del deseo amordazado y la sexualidad recatada de las eras victoriana y eduardiana, que no admitió su idilio con Merchant hasta su muerte en 2005, se suelte de esta manera en la recta final de su vida. “No me da vergüenza. No quería ser insincero ni callarme cosas”, responde. En realidad, sus películas no fueron tan reprimidas como se suele creer. Su debut, La joven pareja (1963), ya incluía un personaje homosexual, igual que Autobiografía de una princesa (1975), Las bostonianas (1984) o un clásico del cine queer como Maurice (1987). “Fui educado en el catolicismo, pero cuando llegó el momento de elegir entre la religión y mi sexualidad, decidí dejar la iglesia. No tengo envidia de los gays jóvenes, porque yo también experimenté mi deseo con libertad. He vivido mi sexualidad sin miedo y sin culpa”.
Artigo completo [EP, 04.06.2023]
sábado, 3 de xuño de 2023
Sargadelos: Paisaxe imaxinaria con carro
A estrutura da composicion é un pouco diferente das anteriores, xa que agora o río non aparece no centro da composición, senón que se desprazou cara á dereita, podendo tratarse dun lago polo que navegan pequenas embarcacións a vela; existen sen embargo elementos comúns que se repiten continuamente, como a grande árbore da esquerda.
Trátase dunha paisaxe rochosa que parece centroeuropea; en primeiro plano aparece un carro con dous homes tirado por unha parella de bois e ao lado unha parella constituída por un home e unha muller; en segundo plano encontrámonos cun palacio medieval cos seus tellados aguzados e as súas torres, e como pano de fondo unhas montañas rochosas.
María Quiroga Figueroa: A louza de Sargadelos (Colección do Museo Provincial de Lugo), p.104
Döstädning
“Mi madre, en cambio, era una mujer muy ordenada, sabia y realista”, explica Magnusson. Pasó una larga temporada enferma antes de morir. Cuando Magnusson comenzó a vaciar su casa tras su partida, encontró una serie de notas prendidas entre su ropa y sus objetos que indicaban qué debía hacer con todo aquello. Había algunos paquetes dispuestos para donar a la beneficencia, algunos libros que devolver a sus propietarios o un traje antiguo que llevar al Museo de Historia, con una nota sujeta con un alfiler en la solapa, donde incluso figuraba el nombre de la persona a la que debería contactar. “Aquello fue un alivio y, en cierta forma, sentí como si mi madre todavía siguiera allí conmigo, guiándome y ayudándome durante todo aquel proceso”, relata. En aquella ocasión, vaciar el hogar de posesiones y recuerdos le resultó un proceso mucho más sencillo y, por fortuna, no requirió ninguna visita a su farmacéutico.
Artigo en EP (03.06.2023)