domingo, 30 de maio de 2021

Howard Carter e Cayetana, Duquesa de Alba

Caldaloba



 A Torre de Caldaloba (ou castelo de Vilaxoán como aparece citado en antigos documentos), foi construída nos séculos XIII ou XIV. O historiador Xabier Moure, que denunciou hai anos o abandono da fortaleza, sinalaba que «aínda que non é, canto a monumentalidade e arquitectura, a máis chamativa, si o é canto ao valor simbólico duns dos períodos que máis tinta ten verquido na Historia da Galicia medieval».

Foi destruída durante ao Revolución Irmandiña e reconstruída despois por Fernán Ares e Constanza de Castro, xenro e filla do mitificado mariscal Pardo de Cela. «Na torre resistiron os citados Fernán Ares e Constanza de Castro os ataques, a finais do século XV, dos Reis Católicos ata que tiveron que renderse ao podrecer a auga do alxibe», explica Moure, quen apunta que no ano 1646 aparece como propietario o conde de Fuensaldaña e vizconde de Altamira, Álvaro Pérez de Viveiro. No ano 1755 foi vendida a Gabriel María Montenegro, do pazo de Caldaloba, situado a uns poucos metros.

Tres modelos masculinos no estudio de Thomas Eakins (Pennsylvania, 1884)

mércores, 26 de maio de 2021

Werther

"Dios sabe con qué delirio seguía yo sus pasos, cómo me embriagaba con sus ojos negros, en los que veía brillar el placer en su pureza completa"
(Werther de Goethe)

Pasquale Stracuzzi



—Un lindo zagalexo,
Prométesme, señor;
Tan lindo, que miralo
Será unha perdición;
Algo curto, ben feito,
De roxa, leda cor,
Con gorchetes de prata,
No estreito cinturón;
Que cando os aires viren
A folla ao catasoI,
Fará garridos pregues,
De min ao rededor.
 

sábado, 22 de maio de 2021

Poema de "Lixeiro", de Ismael Ramos


Na casa de en fronte o home serra, martela.

Cada poucas semanas inicia unha obra nova sen sabermos se rematou a anterior.
Ningún veciño atende. Salvo eu, esta mañá.
Sento no escritorio e intento contar a historia dos meus nervios.
Fixo unha data concreta e despois serro, martelo. Espanto paxaros.
Os meus nervios son homes que entran e saen.
Escribo unha parábola sobre a traizón do mundo contra o mundo.
Un só home que entra e sae. Unha vez.
Esperto cedo e non recibo visitas.
Na casa de en fronte o veciño comeza a traballar antes ca min.
Ningún dos dous sabe da tarefa do outro: os avances, a duración.
O traballo é un misterio. Fixo unha data concreta dende a que empezar. Continúo.
O poema de amor sobrevive ao amor.
Preto de aquí, un home adulto chora na ducha durante dous, tres minutos.
Despois le algo que o reconforta.

xoves, 13 de maio de 2021

 Pedra filosofal, de António Gedeão

Eles não sabem que o sonhoÉ uma constante da vidaTão concreta e definidaComo outra coisa qualquer
Como esta pedra cinzentaEm que me sento e descansoComo este ribeiro mansoEm serenos sobressaltos
Como estes pinheiros altosQue em verde e oiro se agitamComo estas aves que gritamEm bebedeiras de azul
Eles não sabem que o sonhoÉ vinho, é espuma, é fermentoBichinho a lacre e sedentoDe focinho pontiagudoNo perpétuo movimento
Eles não sabem que o sonhoÉ tela, é cor, é pincelBase, fuste ou capitelArco em ogiva, vitral,Pináculo de catedral,Contraponto, sinfonia,Máscara grega, magia,Que é retorta de alquimista
Mapa do mundo distanteRosa dos ventos, infanteCaravela quinhentistaQue é cabo da boa esperança
Ouro, canela, marfimFlorete de espadachimBastidor, passo de dançaColumbina e arlequim
Passarola voadoraPara-raios, locomotivaBarco de proa festivaAlto forno, geradora
Cisão do átomo, radarUltrassom, televisãoDesembarque em foguetãoNa superfície lunar
Eles não sabem nem sonhamQue o sonho comanda a vidaE que sempre que o homem sonhaO mundo pula e avançaComo bola coloridaEntre as mãos de uma criança(La la la ra la ra ra )

A tres bandas

 

martes, 4 de maio de 2021

Sodomitas de Valencia: VI.-Grupo de Tortosa denunciado por Blas Serrat (1626)

 Luis Portugués, escopetero, natural de Tortosa, vecino de Valencia, fue testificado por un testigo varón mayor llamado Blas Serrat, peinero, vecino de Tortosa, de que habría diez y seis años poco más o menos, él y el dicho Portugués se conocieron carnalmente el uno al otro por detrás con actos consumados, cuatro o seis veces en diferentes tiempos por espacio de cuatro años que les duró la dicha amistad ( ... ) [Luis Portugués] respondió después de haber estado muy pensativo, que siendo el reo muchacho y estando en Tortosa habría veinte años, era vecino suyo un muchacho de oficio peinero llamado Blas Serrat, de quien había entendido que había perdido el juicio, y en el dicho tiempo, estando el reo vuelto de espaldas arrimado de cara a la pared de un aposento alto de la casa del dicho Serrat, dicho Serrat arrimó al reo el miembro genital armado al óculo trasero, y hurgándole allí sin entrar dentro le derramó su simiente en cada una de las dichas veces, y luego allí propio, estando de cara a la pared dicho Blas Serrat y arrimado a ella y sin gregüescos, como el reo, dicho reo arrimó el miembro genital armado al óculo trasero del dicho Blas Serrat y allí estuvo hurgando hasta que derramó su semen fuera del óculo sin entrar dentro ( ... ) [Blas Serrat declaró que] en el tiempo y cuando tenía declarado que trataba deshonestamente con dicho Portugués, se acordaba que él se había puesto en la boca el miembro genital del dicho Luis Portugués y no se acordaba bien si fueron dos o tres veces, y en dos dellas se corrompió y derramó su semen dicho Luis Portugués en la boca del dicho testigo que le estaba chupando, porque estaba acostumbrado a mamar el pecho de su madre siendo ya grande, en ocasión que la dicha su madre criaba otros hermanos y estaba cargado de leche el pecho, y que sería de edad de dieciocho años, lo cual sucedió junto a la muralla de la ciudad de Tortosa en una casilla que está por la parte de afuera cerca del hospital ( ... )

Luis Moret, labrador, natural y vecino de la ciudad de Tortosa, de edad de treinta y seis a treinta y siete años, fue testificado por el dicho Blas Serrat de que habría seis u ocho años, que teniendo mucha comunicación con el reo, con ocasión della, dicho reo había tratado de conocerle carnalmente por detrás y de que con todo efecto el reo le había conocido diez o doce veces con actos consumados estando los dos en diversas partes y en especial junto a la puente de la dicha ciudad y en la balsa que llaman del Castillo ( ... ) y también le testificó de que tenía muy grande amistad el reo con otro hombre de la dicha ciudad de Tortosa llamado Joan Tirbi y que muchas veces les veía al reo y al dicho Tirbi ir solos al campo y otras veces se iban de noche por fuera de la ciudad, de que sospechó, como quien conocía las faltas de los dos, que se debían de conocer carnalmente por detrás ( ... ) 

Joan Tirbi, hortelano, vecino y natural de la ciudad de Tortosa, de edad de más de sesenta años, fue testificado por dos testigos varones y mayores. El primero es el dicho Blas Serrat, el cual le testificó de que habría diez y seis años poco más o menos, habían tenido tocamientos deshonestos el reo y él hasta llegar a tener polución el uno y el otro y que el dicho reo le había enseñado las dichas cosas y que no se acordaba cuántas veces habían sido en el discurso del dicho tiempo, si habrían sido doce, o más, y que la última habría sido de seis meses a esta parte, y que dos o tres veces en diversas partes de la dicha ciudad se habían conocido carnalmente por detrás alternativamente el uno al otro con actos consumados ( ... ) 

El otro testigo le testificó de que por tres veces en diversos tiempos había atentado de querer tener con él tocamientos deshonestos y que sólo la primera vez había echado mano de las vergüenzas del testigo y le había hecho venir en polución, y que la segunda le había el reo asido la mano al testigo y que se la quiso poner en la bragueta del reo para que le tocara sus vergüenzas y que lo quiso besar, y que la tercera vez había venido a la casa donde estaba el testigo, que era la del dicho Blas Serrat, y subiéndose el reo por la escalera, le llamaba para que se subiese tras él. Estando este testigo en casa del dicho Blas Serrat, vio que algunas, y muchas noches venía el reo en casa del dicho Serrat y se salían los dichos reo y Serrat juntos y solos fuera de la puente de dicha ciudad de Tortosa y cuando volvía dicho Serrat eran las once o las doce y la mujer de dicho Serrat reñía al dicho su marido porque siempre iba con el reo a aquella hora, y algunos días se iban los dos por la mañana y no volvían en todo el día y muchas veces, cuando el reo no venía a buscar al dicho Serrat, dicho Serrat iba a buscar al reo ( ... ) Había oído decir a Pedro Justo, de oficio zapatero, que viniendo él de la feria de Morella, había visto que estaban en un pajar dicho Serrat y dicho reo cobijados con una capa y que había juzgado mal dellos ( ... ) Blas Serrat le testificó de nuevo de haber tenido tocamientos deshonestos el reo con otras personas, y examinados los dichos contestes, el uno dellos que es varón y mayor, le testificó de que habría ocho años poco más o menos que el reo había trabado conversación con dicho testigo, hablándole de cosas deshonestas y torpes, había tenido tocamientos deshonestos el reo consigo mismo hasta llegar a tener polución, y tocando las partes vergonzosas del testigo, le hacía también al testigo que tocase las del reo, y que de allí a poco tiempo, por otras dos veces, el reo había tenido conversación con el testigo, tratando de cosas deshonestas y tocándose en su presencia sus partes vergonzosas. En una de ellas se las enseñó al reo. El otro conteste, varón y mayor, le testificó de que habría quince o dieciséis años que estando el testigo en el campo, el reo se había llegado a él, y poniéndole en razones le daba quejas de que su mujer no quería consentir que tuviese acceso con ella por tener como tenía su parte natural muy gruesa, y sin advertir que le podían ver de muchas partes, sacó el reo su miembro viril para que lo viese el testigo, de lo cual lo reprendió. 

A.H.N., lnq., lib. 940, fol. 232 r º sq

Pube

A música calada, a soedade sonora