xoves, 28 de marzo de 2019

Máquinas de coser diabólicas



 Muchos médicos del siglo XIX estaban convencidos de que las máquinas de coser, especialmente las de doble pedal, eran artilugios diabólicos, que fomentaban la masturbación femenina. 
El pedal iba conectado a la base de la máquina de coser mediante un palo, que accionaba una rueda. Al mover el pedal arriba y abajo, el palo subía y bajaba, y hacía girar la rueda; así, según la velocidad con que la mujer accionara el pedal, podía variar la velocidad a la que cosía. 
Y, evidentemente, también la velocidad del orgasmo.

Francesca Serra: Las buenas chicas no leen novelas


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